FAQs
Para mí, dar a luz derivó en una vagina excesivamente amplia, con una relajación excesiva de la musculatura a ese nivel: ¿Qué es el rejuvenecimiento vaginal láser y cómo puede este procedimiento ayudarme a resolver mi problema?
El rejuvenecimiento vaginal láser es una modificación de un procedimiento quirúrgico ginecológico clásico, en el que utilizamos el láser para conseguir unas incisiones más precisas, con menor pérdida sanguínea y más pronta recuperación. En esencia, se reduce el exceso de vagina sobrante, aumentando la tensión muscular y de los tejidos de soporte vaginales. Se puede también reconstruir el periné, que es la zona situada entre la entrada de la vagina y el ano. Según Masters y Johnson, la sensación de placer en la mujer es directamente proporcional a la cantidad de fuerzas de fricción generadas. El rejuvenecimiento vaginal láser ayuda a recuperar una óptima fuerza de fricción durante la relación sexual, devolviendo la vagina el aspecto que tenía en la juventud.
¿En qué consiste la vulvoplastia láser de diseño?
Es la remodelación estética quirúrgica de las estructuras genitales externas: labios menores, labios mayores, periné, clítoris e himen.
Se pueden corregir problemas de asimetrías e hipertrofias (excesivo tamaño) de labios menores, introito (entrada de la vagina) demasiado holgado, periné desestructurado por partos o cirugías previas, hiperpigmentaciones de la región vulvar y/o anal, reconstrucciones de himen, piel del capuchón del clítoris demasiado desarrollada. Cada paciente requiere un procedimiento individualizado acorde a sus necesidades y pretensiones.
¿Cuánto dura la cirugía de rejuvenecimiento vaginal láser?
¿Dónde se realiza el procedimiento?
¿Qué tipo de anestesia se requiere?
¿Cuándo se pueden reiniciar las relaciones sexuales?
¿Cuándo se puede reanudar la actividad habitual?
¿Estaré muy molesta tras la cirugía?
¿Estos procedimientos causan cicatrices y cambios en la sensibilidad vulvovaginales?
El láser utilizado en estos procedimientos es preciso y delicado, minimiza la pérdida sanguínea y la inflamación posterior, en nuestra experiencia, nunca hemos observado estas complicaciones en ninguna de nuestras pacientes, aunque con carácter general están descritas en menos del 1% de los casos.
¿Cuánto duran los efectos de estos procedimientos?
¿Cuál es la diferencia de estos procedimientos respecto a los tratamientos de láser vaginales SIN cirugía, tan de moda ahora?
Los tratamientos de láser sin cirugía, tienen su utilidad en casos leves-moderados, tanto de rejuvenecimiento vaginal, como en casos leves-moderados de incontinencia urinaria de esfuerzo. La cirugía de rejuvenecimiento propiamente dicha, quedaría reservada para casos más importantes. Es fundamental una correcta exploración clínica para aconsejar correctamente cual de estas técnicas es la más adecuada para cada caso en concreto.
¿Se puede realizar labioplastias a cualquier edad?
Sí, no hay necesidad de esperar a una cierta edad para realizar este procedimiento, de hecho, si resolvemos el problema en cuanto se presenta, la mujer aumentará su comodidad e incluso desarrollará una mejor autoestima.
¿Es recomendable esperar a labioplastia / rejuvenecimiento vaginal una vez finalizado el tener hijos?
No en cuanto a labioplastia, si el tamaño o forma de los labios menores producen problemas físicos o emocionales, no es necesario esperar a ver cumplido el deseo reproductivo. El embarazo y/o parto no modificará el resultado de esta intervención.
En cambio, el rejuvenecimiento vaginal sí debe esperar a realizarse una vez se haya decidido no tener más embarazos, pues posibles partos tras esta cirugía podrían devolver la vagina al estado previo a la intervención.
¿Se puede realizar una labioplastia y un rejuvenecimiento vaginal a la vez?
No hay ningún problema para realizar las dos intervenciones al mismo tiempo, además se ahorran gastos respecto a si se llevan a cabo en tiempos diferentes.
¿Pueden estos procedimientos quirúrgicos ser practicados por cualquier especialista?
Las pacientes no se dan cuenta de lo importante que es buscar especialistas realmente entrenados en estas técnicas, en principio, cualquier ginecólogo o cirujano plástico al que una paciente pregunte sobre si puede desarrollar estas intervenciones, contestará que “sin ningún problema”, incluso aventurándose a decir que son técnicas “sencillas”, “fáciles” y “sin ninguna complicación”.
Efectivamente, no son cirugías como las de un cáncer avanzado ni a “corazón abierto”, pero es bien cierto que para asegurar la minimización de complicaciones como deshicencias, asimetrías en el resultado final, hematomas o alteraciones en la funcionalidad, se deben aplicar técnicas que, aunque no excesivamente complicadas, sí tienen sus “trucos” para disminuir la incidencia de todas estas desagradables complicaciones, estas peculiaridades técnicas no se enseñan en los programas habituales de formación en ginecología, y a no ser que encontréis un profesional que haya sido entrenado para ellas y además tenga un volumen suficiente de cirugías como para saber lo que lleva entre manos, no os aconsejamos que sean practicadas por un médico estético, ginecólogo o cirujano plástico “cualquiera”.
Una vez se ha extirpado un tejido, es imposible volverlo a su estado original, las consecuencias de ponerse en manos de profesionales sin la suficiente experiencia para realizar este tipo de operaciones, pueden ser desastrosas. Pregúntate: ¿qué experiencia quirúrgica tiene este doctor/a? ¿Dónde y quién lo/la ha formado para aprender esta técnica quirúrgica?